Bestias Marinas

Este otro cuento es de los primeros que escribí hace ya un buen tiempo y creo jamas lo había publicado en el feis, Me inspire para hacerlo en mi fascinación por la vida marina y mi sorpresa absoluta de que el océano terrestre tiene un indice de exploración humana de un 10% así que realmente no sabemos lo que hay haya abajo lo cual se me hace fascinante y me hecha a volar la imaginación.

Los Misterios Del Mar

Anoche tuve un gran sueño, a decir verdad no se si haya sido una experiencia real o solo un sueño como los que tiene toda la gente, pero estoy seguro de que la silueta de aquella criatura va mas haya de la imaginación, mas haya de cualquier situación divina o demoníaca, era un ser de aspecto demencial, ni el hombre mas loco de esta tierra hubiese imaginado nunca a una criatura con una forma tan caprichosa, pues de una ves antes de que cualquier otra cosa pase, voy a relatar lo que ocurrió.

Esa noche fue como cualquier otra, totalmente normal y rutinaria, una noche de viernes cualquiera, llegue a mi casa tan cansado como siempre y cene una chuleta que ya había cocinado por la mañana solo para llegar a comerla y también tome un par de cervezas, después fui a mi cuarto prendí la tele, apague la luz y me puse a ver una de esas películas de terror de vampiros contra hombres lobo, después de un rato me aburrí, me acurruque y me quede dormido, entonces en ese momento tuve una sensación de extrañamiento muy terrible no se si ya estaba dormido o si estaba en proceso de pero fue espantoso, fue como cuando sueñas que te caes desde lo mas alto del cielo y justo antes de caer despiertas muerto de miedo e inmediatamente sabes que todo fue un sueño solo que en mi caso fue radicalmente diferente en lugar de soñar con caídas desde lo alto del cielo comencé a sentir un frio muy fuerte como si estuviera en un puto congelador, era totalmente incongruente, toda esa temporada había hecho muchísimo calor, incluso en las noches la temperatura nunca bajaba un carajo, pero en ese momento hacia un frio de los mil demonios, casi no le di importancia a esa situación, me gire en mi cama viendo hacia la ventana entonces escuche un sonido que me hizo estremecer a tal grado que caí estrepitosamente de la cama, no tenia idea de que podía ser aquel sonido estridente hasta que finalmente mi mente trabajo y recordé el canto de las ballenas, si eso era lo que había escuchado pero no podía ser posible algo así, donde yo vivo no hay océano alguno, tendría que manejar una hora mas o menos para llegar a la costa, de cualquier forma aun estando ahí en la costa de ninguna manera creo que se pudiera apreciar el canto de una ballena con tanta intensidad, supuse que debió ser otra cosa que asemejara aquel canto, quise fijarme por la ventana para ver si lograba ver lo que había provocado el sonido, me acerque a mi ventana, corrí la gruesa cortina… entonces lo que vi me dejo brutalmente pasmado con una cara de sorpresa absoluta y claro también de miedo absoluto, un miedo que rebaso cualquier otro que hubiese sentido anteriormente, lo que vi a través de mi ventana fue a una gigantesca ballena diferente a cualquiera que hubiese visto se que era una ballena por qué las eh visto antes varias veces en mi trabajo, era tan grande como un maldito avión de un color negro radiante muy similar a una orca pero mucho mas grande, mi pánico se acrecentó cuando me di cuenta de que mi casa estaba totalmente sumergida en el océano, no se a cuanta profundidad me encontraba ni como demonios había llegado hasta ese lugar, pero ahí me encontraba en la absoluta  infinidad del océano, mire hacia arriba pero por mas que intentaba ver mas allá y calcular la distancia hacia la superficie solo pude distinguir un rayo de luz que estaba cercano a la ballena, quise analizar mas a mi alrededor pero justo en ese momento la ballena emitió otro de sus potentes gritos que me hizo salir de mi ensimismamiento justo para darme cuenta que la ballena venia directamente hacia donde me encontraba yo, mientras mas se acercaba mas grande me parecía y por fin pude vislumbrar que la luz que había visto era parte de la ballena, ya decía yo que la luz solar jamás podría penetrar en semejante profundidad, la ballena se acercaba cada vez mas rápido a mi  y por un momento pude ver su cara, lo que vi me aberro como no tienen idea, sus facciones no eran las de ningún animal que haya visto en mi vida, eran casi humanas, rígidas, odiosas y se reía, se reía estrepitosamente, aun escucho esa risa de ultratumba en mis oídos tan real como lo escuche en ese momento entonces el cetáceo se detuvo en seco totalmente, parecía que el odio se había transformado en miedo, esa cara fue mas grotesca que la anterior entonces supe lo que causaba su terror sobrenatural, se escucho un terrible bramido marino mucho mas fuerte que el canto de la ballena, se escuchaba como una puta locomotora a toda velocidad, voltee a ver a la ballena que ya estaba dando marcha atrás a sus planes de embestirme, a que no adivinan lo que vi acercándose a ella, era como ver a una jodida montaña moverse a gran velocidad, ese ser debió de medir poco menos de medio kilometro de largo y como unos 300 metros de ancho, era como una serpiente desmesuradamente grande, su cara me recordó mucho a la cara de un dragón o de aquellos dinosaurios marinos prehistóricos, tenia los ojos color azul rey, tenia la clásica nariz de la serpientes, la de dos franjas verticales una al lado do la otra, tenia unos dientes gigantescos y afilados, a lo largo de su cuerpo, en los costados tenia unas bolas transparentes muy extrañas, en el medio de su cabeza tenia un bulto como un cuerno chato en forma de bola muy brilloso, de un momento a otro alcanzo a la ballena y de un mordisco la devoro casi completa, la ballena emitió un sonido lastimero y al siguiente instante todo su cuerpo estaba dentro de la criatura, la criatura como signo de satisfacción encendió cada una de las bolas de los costados de su cuerpo, ese maldito parecía un puto árbol de navidad, el resplandor era tan intenso que logre ver absolutamente todo a mi alrededor con absoluta claridad, para mi horror me di cuenta de que no estaba solo con la criatura, había una enorme cantidad de monstruosos peces oriundos de las mas remotas profundidades, como aquellos que alguna vez vi en una exhibición en un acuario de mi ciudad, ”Los misterios del mar”, así se llamaba, era igual solo que había una variedad asombrosa de peces de tamaños distintos y formas caprichosas, algunos largos y con hocicos largos, otros eran gigantescos y ligeramente humanoides, algunos eran de colores que ninguna retina humana había registrado jamás, era realmente hermoso, finalmente era un descubrimiento increíble, pero lo que no me pareció en absoluto hermoso fue darme cuenta que todas esas criaturas me veían fijamente con miradas horripilantes como si estuvieran viendo la mierda mas apestada de todo el universo, entonces la serpiente me volteo a ver con una mueca sardónica enardecida, el miedo me invadió y quise salir corriendo como un loco a cualquier lugar, experimente un terror inigualable, cuando me iba a poner en marcha y tropecé con algún objeto del suelo, caí estrepitosamente  ¡justo hacia mi puta ventana!, por mi mente paso la ruptura del vidrio, una terrible inundación, el contacto de esos peces conmigo y mi muerte como carnada de esas bestias marinas sedientas de sangre fresca, para mi suerte no fue así, si choque contra mi ventana, pero en lugar de romperla la atravesé, así como se escucha, ahí fue cuando me di cuenta de algo crucial, yo había estado sumergido en el agua desde que me despertó aquel estruendo, salí por la ventana con mi movilidad maniatada, era muy diferente a como me había movido antes, parecía ser como si estuviera realmente en el agua,  de pronto comencé a ahogarme ligeramente, aun no me daba cuenta de lo terrible de la situación, mi mente tardo en procesar los terribles eventos que ahí ocurrían, en primera había cambiado sutilmente de atmósfera, en segunda estaba rodeado de criaturas submarinas que parecían muy encabronadas conmigo y en tercer lugar me estaba ahogando ahora ya muy fuertemente ya que habían pasado unos cuantos minutos en lo que ordenaba bien mis ideas, pero no tuve tiempo de hacer un plan de huida o algo así, antes de que pudiera hacer cualquier cosa todos aquellos seres se lanzaron hacia mi mordiéndome audazmente arrancándome la piel y rompiendo mis huesos sin permitirme actuar de ningún modo, el dolor era terrible nunca había sentido algo así en mi vida, a partir de ese instante toda la experiencia se volvió muy extraña, veía todo de un modo extra corporal, veía a esas bestias marinas devorar salvajemente mi cuerpo, arrancaban los tejidos con furia, destrozaban mi cráneo, se comían mis ojos y mis órganos y en unos cinco minutos mas o menos no quedaba nada de mi, después de eso todo se torno muy divagante, solo escuchaba con claridad la risa sardónica de aquellas criaturas que reían satisfechas por haberme engullido, después todo estuvo negro y yo estaba seguro de mi muerte entonces desperté de golpe en mi cama en la madrugada empapado en sudor frió y pegajoso, tenia muchísimo miedo y hasta creo que hasta me había orinado en la cama, pero no me importo, no me importo en lo absoluto, estaba vivo y no en pedacitos en el estomago de extraños seres subacuáticos, no se si haya sido algo real o no, pero de ahora en adelante al océano y su vida submarina tiene absolutamente todo mi respeto.